El Mercado Central de Alicante es uno de los edificios emblemáticos de la ciudad. Estamos ante un impresionante edificio de forma rectangular al estilo de una basílica.

Dispone de una estructura porticada que distribuye el espacio interior en tres naves a modo basilical. Se emmarca dentro del estilo ecléctico con elementos modernistas. Los arquitectos que presentaron el diseño original fueron Francisco Fajardo Guardiola y Juan Vicente Santa Fé, siendo culminado por Juan Vidal Ramos. La primera piedra fue colocada por el rey Alfonso XIII en 1911, y fue finalmente inaugurado el 12 de noviembre de 1922. El mercado cuenta con una entrada principal situada en la avenida de Alfonso X el Sabio, a la que accedemos por una escalinata, igualmente dispone de una entrada trasera en la plaza 25 de Mayo y de ahí accedemos a los puestos de venta a través de unas escaleras automáticas. El nombre de la plaza de 25 de Mayo se debe a que en esa fecha en 1938, el Mercado Central fue bombardeado a horas de la mañana por las tropas fascistas italianas. El ataque resultó muy sangriento ya que acaeció en un momento muy concurrido del día. Perdieron la vida más de 300 personas y hubo cientos de heridos. Por este trágico motivo el Mercado quedó parcialmente destruido y tuvo que ser reconstruido en tiempos de la posguerra. Otra gran reforma en el Mercado tuvo lugar del año 1988 al 1992, permaneciendo durante este periodo cerrado, trasladándose a la lonja toda las actividades del Mercado.

Si nos referimos a la disposición del mercado tenemos que decir que cuenta con dos plantas, una planta baja donde se reparten principalmente los puestos de verdura, fruta, pescado, huevos, pan, repostería, etc., por su parte en la primera planta dominan los puntos de venta de carne, quesos y embutidos. También se hallan una farmacia y algunos bares donde tomar un café matutino o un aperitivo. El surtido de productos del mercado destaca por su abundancia y copiosidad. A la riqueza de la cantidad se le añade el colorido y la distribución ordenada de las frutas y verduras, además de la frescura y variedad de los pescados y mariscos, y por supuesto, también, la diversidad y calidad de las carnes y fiambres. Mención aparte reciben los productos autóctonos de la región, tales como los cítricos, el turrón o los vinos moscatel de la región que gozan de gran renombre en toda España. Los propietarios de los casi 300 puestos son en su mayoría alicantinos y personas de la provincia, en muchos casos el puesto permanece en las mismas manos después del paso de tres generaciones.

El horario de apertura es de 7:30 a 14:30 de lunes a viernes y los sábados de 7:00 a 14:00. Sin duda, constituye un punto obligatorio en nuestra visita a Alicante ya que se trata de un lugar bonito, peculiar y característico, donde se mezclan tanto  lugareños como turistas y donde  debes dejarte imbuir por el ambiente mediterráneo, ese ambiente distendido que te permite charlar y bromear con el tendero y conversar con otros viandantes. Un sitio donde preguntar que: ¿qué me recomienda hoy, o cómo puedo cocinar esta carne o pescado?  Sin olvidarnos de que la calidad precio te sorprenderá, a saber, espléndidos productos a precios razonables.  A las horas del mediodía  estás casi obligado a “respetar” el aperitivo, es decir, tomarnos unas tapas con  una caña o un vinito. No olvidemos tampoco que al lado, en la calle 25 de Mayo se encuentra el mercado de flores, que asimismo cuenta con un inmejorable surtido y se presenta muy concurrido, especialmente los sábados. En definitiva, introduce dentro de tus planes turísticos ir a visitar el Mercado Central, un lugar céntrico, bello, climático y delicioso.

Visita el Mercado Central de Alicante.