Al llegar a la plaza de España de Alicante, podemos contemplar desde fuera la imponencia y belleza de su plaza de toros. La entrada, rodeada de palmeras y con un monumento de estatuas en tamaño natural de un encierro de toros con caballos, garrochistas y cabestros de gran realismo, invita al turista a su visita. Su forma es la típica circular de “Coliseo”, a semejanza de muchas plazas de toros, el color de la fachada tiende a un color arenoso. Su edificación data del año 1847, la causa de su construcción residía en que hasta ese momento, Alicante no contaba con una plaza de toros estable, había tenido algunas plazas “móviles” para atender a la afición taurina en diversos lugares de la ciudad como en la plaza de las Barcas o en la posada de San Francisco, o una provisional que fue construida en 1839 en la antigua plaza del Barranquet, hoy Ruperto Chapí. Vista esta carencia surgió la necesidad de erigir una plaza de toros permanente y de categoría en Alicante, el proyecto fue encargado en 1847 a Emilio Jover, que poco antes había construido el Teatro Principal. La nueva plaza cumplió con su cometido en sus principios, sin embargo pasados unos años se observaron relevantes daños y deficiencias. Por todo ello, fue encomendado al arquitecto José Guardiola Picó en 1884, la reforma del recinto. Para este fin, se acometió una reforma prácticamente absoluta del edificio, creando un segundo piso, escaleras, accesos, dependencias anexas y agrandando considerablemente su capacidad, alcanzando un aforo colosal de 15000 espectadores, no debemos olvidar que en aquel momento Alicante contaba con unos 19000 habitantes; es notorio que en aquel tiempo las corridas de toros y ferias taurinas constituían un importante pasatiempo, y a la vez un evento social de significada relevancia. La renovada plaza fue finalmente inaugurada en 1888, constaba de un patio de caballos, una espaciosa cuadra, cuatro corrales, chiqueros, enfermería y capilla. Esta estructura original se ha mantenido casi intacta hasta nuestros días. Los graderíos están distribuidos en una fila de barrera, dos de contrabarrera y veinte filas de tendido, con zonas delimitadas de: sombra, sol, sol y sombra, más arriba se ubica el sillón de rellano y dos líneas de andanadas donde se encuentran los asientos para el palco de presidencia. En la parte de abajo se encuentra el ruedo, con su superficie circular y arenosa. El círculo está rodeado por una barrera de madera, con sus burladeros correspondientes. Existen cuatro entradas a la arena, son la puerta grande, la de cuadrillas, toriles y arrastre.
La Plaza de Toros de Alicante ha vivido de primera mano todas las vicisitudes sociales y políticas de Alicante y España en general; un hito fundamental fue la creación y popularización de las fiestas de las Hogueras de San Juan que trajo consigo la anual feria taurina de las Hogueras dentro del recinto de la plaza de España. Desde su origen, su gestión ha recaído sobre distintas entidades, pasando por el Ayuntamiento, como por otras diferentes sociedades privadas. Reseñables son también las diversas reformas que han modernizado el recinto, por ejemplo: la ampliación y pavimentado de pasillos, aseos y escaleras, y otros avances que facilitan el acceso, por ejemplo: los ascensores, o la eliminación de barreras arquitectónicas para favorecer el desplazamiento a las personas con movilidad reducida, y mejoras en la comodidad de las gradas, como consecuencia se ha disminuido el aforo en unas 4000 plazas hasta llegar a una capacidad para un máximo de 11000 espectadores.
Dentro de la plaza se encuentra su singular museo taurino, que cuenta con una sala principal, una biblioteca, una sala de audiovisuales para realizar proyecciones, además de una sala de conferencias y exposiciones donde se celebran ponencias y coloquios. Posee una exposición permanente de toreros alicantinos como Vicente Blau ”El Tino”, Francisco Antón “Pacorro”, Vicente Fernández “El Caracol”, José María Manzanares y Luis Francisco Esplá. Aparte de ello, podemos encontrar trajes de luces, fotografías, cuadros, carteles, muletas, capotes, esculturas, cabezas de toros, abanicos, etc. Igualmente, hay un lugar destacable para una importante recopilación de textos de índole taurina, de ilustres poetas como Ruben Darío, Lorca o Alberti.
Los horarios de visita del museo y plaza de toros son:
Del 26 de junio al 30 de septiembre:
- De martes a viernes, de 10:30 a 13:30 y de 18:00 a 21:00.
- Los sábados, de 10:30 a 13:30.
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Los domingos, lunes y festivos cerrado.
Del 1 de octubre al 25 de junio:
- De martes a viernes, de 10:30 a 13:30 y de 17:00 a 20:00
- Los sábados de 10:30 a 13:30
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Los domingos, lunes y festivos cerrado.
El acceso es gratuito.
¿Cómo podemos llegar?
En autobús, podemos ir en los siguientes números: 01-03-04-24. Nos bajamos en la parada “Plaza de Toros”
En el “Tram”, en las líneas: 1-2-3-4. Nos bajamos en la parada “Mercado” y damos un pequeño paseo, pasando por la calle de San Vicente, hasta llegar a la plaza de España.